Hoy paso a hablar de Madagascar 2, un juego que, si bien la película mereció la pena verla por los pingüinos, después de jugar casi una hora no llegaron a aparecer, pero, claro, el juego no se centra tan sólo en ellos. En fin, paso a comentar el mismo.
El sistema de juego es de lo más simple, apenas tienes opciones, sino que el rey Julien, ese loco lemur cuya voz no se parece en nada a la de la película (es que ni intentarlo, ya que es una voz muy característica) te va diciendo exactamente lo que debes ir haciendo. Vas alternando los personajes principales (Alex, Marty, Melman y Gloria), cada uno con unas características especiales para el desarrollo de cada uno de los minijuegos que Julien te va presentando. Cada vez que no se supera uno de estos sencillos minijuegos se vuelve a empezar con el mismo, hasta que lo superes (de momento sólo hemos fallado una vez en tres minijuegos, pero no es difícil pasarlo a la segunda, por lo que no sé si el jugador se quedaría atascado en el minijuego que no logre superar, pero esto no es fácil que ocurra). Esto es algo que no me gusta, la poca flexibilidad del sistema de juego. Mi pareja y yo nos íbamos turnando las pruebas, y ya tanta sencillez nos cansaba un poco. Insistíamos a ver si aparecían los pingüinos, pero nada, así que, cuando pasó casi una hora de juego, lo dejamos para otro día, para cuando tengamos ánimo para seguir obedeciendo las instrucciones del rey Julien.
Antes de iniciar la partida puedes competir con otro personaje en ciertos minijuegos que se salen de las obligadas pruebas del rey Julien y en los que puedes elegir el nivel, el personaje con el que quieres jugar, etc.
Cuando nos animemos a engancharnos a Madagascar 2 y lo juguemos de cabo a rabo le daré, como dije ayer con el de La leyenda de Spyro, una calificación más justa; hasta entonces lo dejaré en el aire...
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Muchas gracias por participar. ¡Vuelve pronto!